Alimentación

Descripción

Ideas para que los niños coman bien

Aprender a comer bien o a alimentarse es uno de los principales objetivos que debemos trabajar con los pequeños desde lo antes posible, ya que esto influirá en la alimentación de los adultos y evitará problemas de salud en un futuro.

Con respecto a la comida, podemos plantearnos dos grandes objetivos, conseguir que coma bien, un objetivo a largo plazo y, conseguir que coma de forma autónoma. A continuación, os ofrecemos diversas propuestas y consejos para alcanzar ambos objetivos.

¿Cómo conseguimos que el niño coma bien?

La hora de la comida es un momento crítico tanto si los niños comen bien como si dan algún problema, es un tema que nos preocupa: queremos que estén bien alimentados y que coman correctamente.

Intentar que los niños coman de forma variada es una misión que puede resultar difícil, pero que si se comienza desde pequeños, conseguiremos que en un futuro sepan alimentarse de una forma adecuada, evitando problemas de obesidad, diabetes, hipertensión… Por lo que es uno de los objetivos más importantes en la infancia. Para ello, os ofrecemos algunas propuestas que podrán facilitar esta tarea:

• Hacer que la comida sea atractiva visualmente: Presentar la comida en pequeñas porciones (lo necesario de acuerdo a su edad). Intentar utilizar alimentos muy variados, con colores llamativos, utilizando formas diversas, “escondiendo” los alimentos que menos le gustan en figuras divertidas… Existen numerosos libros de cocina enfocados a los más pequeños, que os proporcionarán ideas para hacer la comida más atractiva para los peques.
• Cocinar con los niños: A la mayoría de los niños les encanta cocinar, manipular los alimentos, mancharse las manos…por ello es una buena idea que ellos participen en la elaboración de su propia comida. Encárgales tareas adaptadas a su edad, como apretar la naranja para hacer zumo, que te ayude a incorporar o remover los alimentos… Este tipo de actividades pueden estimular el apetito del niño, y al haber ayudado ellos en la elaboración, tendrán más ganas de probar el menú.
• Dar ejemplo: No podemos exigir a los niños que coman de todo cuando somos los mismos adultos los que no llevamos una dieta equilibrada; es importante que ellos nos vean comer alimentos variados y saludables , e intentar no utilizar la expresión NO ME GUSTA delante de ellos.
• Comer con ellos: El momento de la comida no debe ser sólo una actividad para alimentarse, debemos hacer de él un momento de socialización. Cuando comes en compañía, sueles comer mejor, y eso le pasa también a ellos. Quitar el foco de atención sobre la comida del niño y mantener una conversación familiar puede ser muy útil.
• Sistemas de recompensa: A partir de los dos años son muy útiles los carteles de pegatinas. Cada vez que coma bien o que pruebe algún alimento nuevo, recompensarlo de manera positiva. NO es recomendable hacerlo con chucherías u objetos materiales, proponle hacer algo divertido en familia, que él sea quien elija el parque donde ir, invitar a un amigo a jugar a casa…
• Respetar las etapas: Evidentemente, como sabemos la incorporación de nuevos alimentos a la dieta de los niños, no puede hacerse de golpe, ya que podría tener alguna alergia o intolerancia a algún alimento. La incorporación de alimentos deberá ser progresiva y tal como nos aconseje el pediatra.
• Comer lo necesario: Es importante no obsesionarse con que los niños coman siempre la misma cantidad, puesto que cuando dejan de crecer con tanta rapidez, no necesitan la misma cantidad de calorías y los acabaremos sobrealimentándolos.
• Duración de las comidas: No es recomendable que las comidas duren menos de 20 minutos ni más de 40 minutos. De esta forma ayudaremos a tener una buena digestión. 

Éstos son algunos de los consejos para conseguir que el niño aprenda a comer de todo. Además de todo esto, es muy importante que el momento de la comida no sea un momento estresante, si no todo lo contrario, intentar que sea un momento en familia, agradable, sin distracciones externas (nada de televisión, teléfono…)

¿Cómo hacer que el niño coma solo?

Éste es otro reto importante en relación con la comida. Al principio son los adultos los que se encargan de la alimentación de los peques al 100%, pero a medida que van creciendo y van ganando en autonomía, debemos hacerlos partícipes de su propia alimentación, en un principio será cogiendo el biberón, el vaso de agua… hasta que consiga manejar los cubiertos él mismo de forma correcta. Para ello debemos:

• Ser pacientes: La paciencia es la mejor aliada en estos casos. Cuando cojan la cuchara, el tenedor o el vaso por primera vez, lo más probable es que lancen alimentos, se ensucien, se caigan al suelo…no por ello debemos rendirnos, con paciencia y práctica, acabará comiendo solo, nosotros también fuimos niños!
• Dar ejemplo: Es muy importante que cuando comamos con ellos les demos ejemplo y comamos de una forma correcta, bien sentados, utilizando los cubiertos de forma adecuada… los niños aprender por imitación, por lo que si nos ven comer mal o bien, influirá en la forma de comer de ellos.
• Tener en cuenta su nivel de desarrollo: Como ya sabemos no todos los niños maduran a la vez, y al fin y al cabo, la acción de comer va a ir muy relacionada con el grado de desarrollo motor que tenga el niño, por lo que antes de intentar que como solo, debemos estar seguros de que a nivel motor están preparados para hacerlo.
• Darle alimentos que sean atractivos para ellos: Para que empiece a comer solo, en primer lugar deberemos hacerlo con aquellos alimentos que sean apetecibles para ellos. Además, comenzar con alimentos troceados para que sea más fácil para ello.
• Crear hábitos: Intentar comer siempre a la misma hora, en un lugar adaptado (no en el sofá) y en compañía, haciendo de la comida un momento divertido pero sin caer en el juego. Intentar que no haya distracciones (TV, teléfono…)
• Ser positivo: Hacer de la comida una experiencia positiva, intentando ocultar nuestra frustración cuando las cosas no salen como nosotros esperamos, felicitar al niño cuando lo hace bien e intentar motivarlo cuando no lo hace tan bien.
• Hacerle sentir mayor: A los niños les encanta sentirse “adultos” por lo que una manera para motivarles es decirles que comen solo porque son “mayores” y contarle a la familia, amigos, compañeros… que ya come solo porque es “mayor”. 

Lo más importante para que el niño aprenda a comer de todo y a comer solo, es que nosotros, los adultos, les demos ejemplo de ello y sobre todo, que el momento de la comida sea en un ambiente relajado, donde los niños se sientan a gusto. Estas metas pueden no conseguirse tan pronto como deseamos por lo que debemos tener paciencia y no frustrar a los más pequeños en ningún momento, ya que como sabemos, cada niño tiene un ritmo diferente y debemos respetarlo en todo momento.