Destacado
¿Cómo aumentar la autoestima en los niños/as?
Comparte este artículo en
Artículo de Mr.maboo Ocio Saludable (Licenciado en Educación Física)

La autoestima es el amor y aprecio que tenemos por nosotros mismos. Cada nueva experiencia, cada éxito o fracaso y todas las cosas que hacemos van formando y cambiando la imagen que tenemos sobre nosotros mismos. Cuando un niño está en su etapa de desarrollo, se está formando su autoestima, y la autoestima en los niñ@s es especialmente vulnerable, ya que tiene pocas experiencias con las que formarse una idea sobre si mismo.

Nutrir la autoestima de tu hij@ puede parecer una gran responsabilidad. Después de todo, la autoestima juega un papel fundamental en el desarrollo de los niñ@s, ya que, entre muchas otras cosas, refuerza la confianza que tienen en sí mismos. 

“La autoestima proviene de sentir que uno es aceptado, que es capaz, y de saber que nuestras contribuciones son valiosas y valen la pena”, dice Jane Nelsen, terapeuta familiar radicada en California y coautora de la serie Positive Discipline (Disciplina positiva). 

Un niñ@ está en pleno proceso de crecimiento y de formación de su personalidad, su bienestar depende no sólo de sí mismo, sino también del entorno familiar y académico.

De hecho, ambos ámbitos están en clara conexión, por ello, es muy positivo que exista una comunicación constante entre los profesores del colegio y los padres. Las tutorías tienen como objetivo intercambiar impresiones para analizar no sólo la evolución académica del niño, sino también su actitud y su comportamiento.

¿Cómo pueden potenciar los padres la autoestima de un niño?

Aquí tienes algunos consejos para atender las necesidades emocionales de un hij@ y ayudarles a fortalecer su autoestima:

1) El juego no sólo es una forma de entretenimiento, sino también un excelente estímulo a nivel emocional para alimentar la autoestima de cualquier niño. Por ello, cualquier pequeño se alegra cuando sus padres juegan con él. Existen actividades muy placenteras que favorecen el contacto con la naturaleza: andar en bicicleta, realizar una excursión, salir al parque, hacer deporte… Te proponemos una película interesante que puede servir de reflexión para mostrar cómo se siente un niñ2 cuando su familia no tiene tiempo para estar con él por motivos de trabajo: ‘Diario de una niñera’.

2) Para alimentar la autoestima de un niñ@ es positivo que tenga un contacto regular con otros miembros de la familia. Especialmente, con los abuelos. Los abuelos se han convertido en un soporte emocional firme en tiempos de crisis, ya que cuidan de los peques durante muchas horas a la semana. Sin embargo, algunos expertos aseguran que conviene poner límites a esta situación para no caer en el rol del abuel@ esclavo o abuel@ canguro.

3) Dale amor incondicional. La autoestima de un niñ@ florece con la devoción incondicional que transmite el amor. Tu hij@ se sentirá mejor si lo aceptas tal y como es, sin importar cuáles son sus puntos fuertes, sus dificultades, su temperamento o su destreza. Así que dale mucho amor, abrazos y besos. Y no olvides decirle cuánto lo quieres. Cuando tengas que disciplinarlo, aclárale que es su comportamiento y no él lo que es inaceptable. Por ejemplo, en lugar de decirle “¡Eres un niñ@ malo!” o “¿Por qué no puedes ser bueno?”, dile: “No estuvo nada bien que empujaras a Gabriel. Puedes lastimarlo. Por favor, no empujes”. 

4) Bríndale atención. Aparta tiempo para dedicarle a tu hij@ tu atención completa. Eso le ayudará a reforzar la sensación de que es valioso e importante para ti. No tiene que ser mucho tiempo, pero, por ejemplo, si tu niño quiere hablar contigo, deja de mirar la correspondencia o apaga el televisor para conversar con él. 

Míralo a los ojos para que sepa que realmente lo estás escuchando. Y si un día tienes poco tiempo, díselo, pero ten en cuenta sus necesidades. Le puedes decir: “Cuéntame sobre tu dibujo y cuando termines, me pondré a cocinar”.

5) Establece límites. Establece algunas reglas razonables. Por ejemplo, si le dices a tu hij@ que tiene que comer su merienda en la cocina, no le permitas que coma por toda la casa al día siguiente. O si le pides que ponga la ropa sucia en el cesto designado para ello, después no le digas que no importa si la deja en el suelo. 

Es importante que sepa que algunas reglas no se pueden cambiar. Es posible que tengas que repetir muchísimas veces las reglas que estableciste, antes de que las siga. Es recomendable que seas clara y consistente. 

6) Fomenta riesgos saludables. Anima a tu hij@ a que explore algo nuevo, como probar comida diferente, hacer un nuevo amigo o montar en bicicleta. Aunque siempre existe la posibilidad del fracaso, sin riesgos no hay oportunidades para el éxito. 

Así que permite que tu hijo experimente y trata de no intervenir mucho. Procura no “rescatarlo” si muestra frustración al usar un juguete nuevo. Si intervienes y le dices “deja que yo lo haga”, puedes fomentar su dependencia y dañar su autoestima. Su autoestima aumentará cuando exista un equilibrio entre tu necesidad de protegerlo con su necesidad de abordar nuevas tareas. 

7) Déjalo que cometa errores. Lo más seguro es que tu hij@ cometa errores. Sin embargo, los errores también son lecciones valiosas para que tenga confianza en sí mismo. Por ejemplo, si pone su plato demasiado cerca del borde de la mesa y se cae, pregúntale qué puede hacer de manera diferente la próxima vez para que no suceda lo mismo. De esa forma su autoestima no sufrirá y comprenderá que es normal cometer errores de vez en cuando.

Cuando tú misma cometas un error, admítelo. Al reconocer tú tus propios errores, le estás enseñando a tu hij@ una poderosa lección, ya que eso le ayudará a aceptar sus propios errores con más facilidad. 

8) Celebra lo positivo. A todas las personas les gustan las palabras de aliento. Haz un esfuerzo por reconocer, todos los días, las cosas buenas que hace tu hij@ y dilo en voz alta. Le puedes comentar a su papá: “José lavó todos los vegetales para la cena”. El pequeño no sólo disfrutará de tus palabras de aliento sino también de los comentarios positivos de su padre. Sé específica. En lugar de decir “¡Lo hiciste muy bien!”, di: “Gracias por esperar con tanta paciencia en la fila”. 

Tu pequeño tendrá la sensación de haber logrado algo y su autoestima se fortalecerá. Además sabrá exactamente qué fue lo que hizo bien. 

9) Escucha con atención. Si tu hij@ te quiere decir algo, detente y escúchalo. Necesita saber que sus ideas, deseos y opinión importan. Ayúdalo a sentirse cómodo con sus emociones. Dile: “Comprendo que estés triste porque tienes que despedirte de tus compañeros de la escuela”. Si aceptas sus emociones sin juzgarlo, reafirmas sus sentimientos y le demuestras que lo que dice es importante. Si compartes tus propios sentimientos, él expresará los suyos con más confianza. 

10) No compares. Comentarios tales como "¿Por qué no eres como tu hermana?” o “¿Por qué no eres agradable como Pedro?”, simplemente le recordarán a tu hijo sus defectos. Es probable que sienta vergüenza, envidia y presión por competir. Incluso comparaciones positivas como “Tú eres el mejor jugador”, son potencialmente dañinas porque a tu hijo se le hará difícil alcanzar tu nivel de exigencia. Si le dices que lo aprecias por ser como es, será más probable que se valore a sí mismo. 

11) Ofrécele empatía. Si tu hij@ se compara desfavorablemente con sus hermanos o sus amigos ("¿Por qué no puedo coger bien la pelota como hace Sofía?”), demuéstrale empatía y señálale uno de sus puntos fuertes. Por ejemplo: “Tienes razón. Sofía coge muy bien la pelota. Y tú pintas muy bien”. Esto le puede ayudar a aprender que todos tenemos puntos fuertes y débiles, y que no tiene que ser perfecto para sentirse bien consigo mismo.


12) Ofrécele aliento. Todos los niñ@s necesitan apoyo de sus seres queridos. Es importante repetirle que creen en él y que lo animen a seguir adelante. Dar aliento significa reconocer el progreso, y no sólo premiar un logro. Si tu hijo tiene dificultades en abrocharse el pantalón, dile: “Estás poniendo todo tu empeño, ¡y casi lo logras!” en lugar de “No, así no. Déjame que yo lo haga”. 

Existe una diferencia entre alabar y dar aliento. La alabanza puede hacer sentir a un niñ@ que sólo es “bueno” si hace algo perfectamente. Dar aliento, por otro lado, reconoce el esfuerzo. Si le dices a tu pequeño: “Háblame de tu dibujo. Veo que te gusta el púrpura”, es mejor que “Es el dibujo más bonito que he visto”. 

Demasiadas alabanzas pueden impactar de manera negativa su autoestima, ya que se sentirá presionado al esperar que otras personas aprueben sus tareas. Es recomendable que repartas las alabanzas juiciosamente y ofrezcas aliento sin límites. Eso ayudará a que tu hijo crezca con una alta autoestima. 

Esperamos que todos estos consejos os sirvan de ayuda, un saludo de parte de todo el equipo de Mr.maboo.

Comparte este artículo en
Mr.maboo Ocio Saludable
Licenciado en Educación Física
Isaías García es Diplomado y Licenciado en Educación Física
Ver perfil completo
Autoestima en los hijos
Que nuestros hijos se conviertan en personas felices y equilibradas es un tema que preocupa mucho a los padres, en esta colección ofrecemos una guía para estimular el autoestima de los niños y otra para desarrollar su inteligencia emocional, tema de suma actualidad, por último una serie de cuentos para ilustrar a los mas pequeños.
Autoestima y adolescentes
La adolescencia es una época de cambio y la confianza en si mismo del adolescente se ve, a menudo, afectada. En esta colección ofrecemos una guía destinada a los padres y otra al adolescente con pautas para aumentar la autoestima y un programa para mejorar su inteligencia emocional, pilar básico para un adecuado desarrollo.
Recursos
En esta sección os ofrecemos una gran colección de actividades para hacer con los niños o proponérselas para que las hagan ellos solos. Incluimos actividades propuestas por nuestro equipo de profesionales como manualidades, juegos o recetas de cocina, entre otros, que serán muy útiles para estimular y divertir a los niños.
Nuestros expertos te ayudan
Ponemos a tu disposición nuestro equipo de psicopedagogos para que les hagas tus preguntas acerca de este y otros temas que te preocupen. ¡No lo dudes y haznos tus preguntas!
Últimas dudas resueltas
  • Usuario anónimo preguntó:

    Hola mi hijo de 5 años tiene miedo a la oscuridad, no quiere pasar la noche en su habitación ni andar por casa solo a menos que estén las luces encendidas. Nuestra casa no es grande, por lo que siempre nos escucha y si nos llama acudimos pero se niega a ir sin nosotros a habitaciones...

    Responde Equipo Psicopedagógico de El faro de tiza, Psicopedagogía, Psicología, Educación y Animación a la lectura :
    Hola, en principio es normal que un niño de la edad de tu hijo manifieste miedo a la oscuridad, alrededor de los 3 años la capacidad cognitiva...
    Leer respuesta completa
  • Usuario anónimo preguntó:

    Mi hija de 10 años es muy tímida, le cuesta mucho hacer amigos, ahora que llega el verano me da pena porque la única niña con la que juega es una niña de su cole y durante estos meses no se ven. ¿Cómo puedo ayudarla a hacer amigos?

    Responde Macarena Requena, Psicóloga y Psicopedagoga, Atención a la diversidad y problemas de conducta:
    Hola, con los datos que nos ofreces es un poco difícil darte unas orientaciones adecuadas, en muchas ocasiones confundimos timidez con otras dificultades...
    Leer respuesta completa
  • Ver más consultas
Libros urgentes en agapea.com
Premio Empresa Responsable con la Infancia 2017
Política de privacidad
Copyright © Agapea Factory S.A 2024