"Inside Out" (Del revés), la última película de PIXAR se apoya en la neurociencia real y las más avanzadas investigaciones psicológicas para acercarnos a las profundidades del cerebro de una niña. La producción ha contado con el asesoramiento del profesor de psicología Dacher Keltner de la Universidad de California en Berkeley, experto en el estudio de las emociones.
La acción de la película transcurre principalmente dentro de la cabeza de Riley, una niña feliz de 11 años a la que le encanta el hockey. En el interior de la mente de Riley encontramos sus emociones básicas al mando: Alegría, Miedo, Tristeza, Ira y Asco (Algunas otras quedaron fuera para que tuviese más sentido) interaccionan y se manifiestan desde su mente hacia el exterior. Cada una con una personalidad y aspecto que las define y las hace reconocibles para el público.
De esta manera Pixar nos ofrece una forma muy visual y accesible de explicar las diferentes emociones que gobiernan nuestro interior, y no solo eso también nos representa como funcionan procesos básicos de la mente como por ejemplo la memoria, por supuesto tomando sus licencias artísticas, y es debido a esto por lo que resulta tan atractivo para los educadores y niños, ya que supone una vía muy útil para comprender y entender los procesos mentales que en muchas ocasiones nos abruman y son tan complicados de entender. La película sugiere que, de alguna manera, todas las emociones tienen su propósito, información muy acorde con las últimas investigaciones.
Esta película nos hace pensar y darnos cuenta lo difícil que es para los niños y no tan niños, entender las emociones, como funcionan y nos afectan. Somo seres emocionales y racionales, es más, primero sentimos y después razonamos, sin embargo, vivimos en una sociedad muy regulada y formal que ha menospreciado la educación emocional, tanto es así que en los últimos años han florecido multitud de cursos, asociaciones o libros que nos ayudan a manejar y conocer nuestras emociones, algo tan absolutamente propio e innato pero aún así a veces nos resulta extraño o desagradable.
Si no somos capaces de diferenciar entre miedo, ira, preocupación… entre muchas otras, no seremos capaces de saber como actuar en cada situación. Enseñar a los niños que es normal estar enfadado, que a veces todos podemos estar tristes o que todos tenemos sentimientos y “permiso” para expresarlos hará de ellos unos adultos equilibrados emocionalmente.
Hola mi hijo de 5 años tiene miedo a la oscuridad, no quiere pasar la noche en su habitación ni andar por casa solo a menos que estén las luces encendidas. Nuestra casa no es grande, por lo que siempre nos escucha y si nos llama acudimos pero se niega a ir sin nosotros a habitaciones...
Mi hija de 10 años es muy tímida, le cuesta mucho hacer amigos, ahora que llega el verano me da pena porque la única niña con la que juega es una niña de su cole y durante estos meses no se ven. ¿Cómo puedo ayudarla a hacer amigos?