El colegio no es sólo el lugar donde se aprenden contenidos académicos, esta institución proporcionará, además increíbles experiencias y amigos que en ocasiones durarán para toda la vida. El alumno conocerá y aprenderá de muchos profesores a lo largo de su periodo educativo, a algunos los apreciará y mantendrá un grato recuerdo de estos, a otros los temerá, de otros aprenderá mucho más que el contenido curricular. Es muy importante que los padres tengan una relación fluida y de respeto con los profesores, puede que, en ocasiones, no estemos de acuerdo con su forma de hacer pero delante del niño no es lugar para expresarlo.
Los niños harán y romperán amistades infinidad de veces a lo largo de su estancia en el cole infantil, el colegio de primaria, el instituto… a medida que crezcan, estas, serán mas importantes y duraderas para ellos. En el colegio conviven niños de circunstancias, características y temperamentos dispares lo que, si es enfocado adecuadamente, enriquecerá la experiencia vital pero que inevitablemente provocará conflictos. Los conflictos forman parte de la convivencia, no debemos huir de ellos, sino enseñar, junto a los agentes educativos, a resolverlos de forma asertiva.
Existen ciertos temas que provocan temor, especialmente, a aquellos que somos ajenos a sistema educativo, temas como el bullying o acoso escolar, el fracaso escolar, las dificultades académicas… en este caso la prevención, conocimiento y comunicación entre todos (padres, alumnos, profesores) paliarán en gran medida estas problemáticas.
La educación evoluciona constantemente, cada vez más alejada de aquellas clases magistrales, con pizarra verde incluida, tan presentes en el imaginario colectivo. Ahora se habla de TICs (tecnologías de la información y comunicación) ya no es raro ver ordenadores, tablets o pizarras digitales en las aulas, se habla de inteligencia emocional, de aulas inclusivas, de orientación… En general la escuela se adapta a las necesidades de sus alumnos y está abierta su medio.